Es un biotopo que acoge al río y al entorno del mismo, que de manera zigzageante baja desde la frontera con Navarra hasta el municipio de Andoain. Es un lugar muy interesante desde el punto de vista faunístico y florístico, ya que en él se fusionan el medio acuático y el terrestre. Sin embargo, el Biotopo no está aislado, y es un componente más de un paisaje mucho más amplio. Así, el Valle de Leitzaran en su conjunto, guarda un gran patrimonio cultural y natural. Por lo tanto, las características del Biotopo enriquecen al conjunto del valle, y viceversa. Si bien el patrimonio natural es muy importante, las actividades que durante largos años a conocido el río están aún muy presentes gracias a los vestigios que a día de hoy se conservan.